El caos se apodera de xAI, la empresa de inteligencia artificial de Elon Musk. En un movimiento tan drástico como inesperado, la compañía ha despedido a al menos 500 empleados de su equipo de anotación de datos. La noticia se ha extendido rápidamente a través de correos electrónicos y del canal de Slack de la empresa, donde los trabajadores han visto cómo sus accesos eran revocados de inmediato.
La razón oficial es un "giro estratégico": xAI planea reducir su equipo de "tutores de IA generalistas" para centrarse en los "tutores especializados". Estos trabajadores despedidos, que son el equipo más numeroso de la compañía, desempeñan un papel clave en el desarrollo de Grok, el chatbot de Musk, enseñándole a entender el mundo. En un anuncio a través de X, un portavoz de la empresa afirma que planean multiplicar por diez el número de tutores especializados, aunque no ha dado detalles sobre la transición.
El ambiente en la empresa ya era tenso. El anuncio de los despidos llega solo días después de que varios directivos del equipo fueran despedidos sin previo aviso. Varios trabajadores han revelado que en los días previos a los despidos, se les convocó a reuniones individuales para repasar sus logros y responsabilidades, y el jueves por la noche se les pidió que se prepararan para una reorganización. Algunos recibieron pruebas de última hora para clasificar sus futuros puestos, y a los que se quejaron por la falta de tiempo, se les desactivó la cuenta de Slack casi de inmediato.
Esta situación no solo genera una gran incertidumbre entre los empleados, sino que también pone en entredicho el desarrollo de Grok. El equipo de anotadores de datos es fundamental para el entrenamiento del chatbot, y un despido masivo de esta magnitud podría afectar seriamente su progreso.