El gran sueño de Europa de competir con Estados Unidos y China en el sector tecnológico, especialmente en inteligencia artificial, parece estar en la cuerda floja. Un año después de que el ex presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, presentara un ambicioso informe para reducir la brecha de innovación, un nuevo estudio de Deutsche Bank revela que los avances han sido decepcionantes.
El análisis muestra que, de las 383 recomendaciones de Draghi, solo el 11.2% se han implementado por completo. La UE ha tenido más éxito en áreas como la defensa y la reducción de la burocracia, pero la innovación sigue siendo su punto débil. A pesar de iniciativas como 'InvestAI', que busca movilizar 200.000 millones de euros para la IA, la mayoría de las medidas están estancadas en una fase inicial.
El informe advierte que Europa sigue careciendo de financiación, infraestructura de datos y un marco que favorezca la comercialización de patentes. Estas deficiencias la dejan muy por detrás de Silicon Valley y el ecosistema tecnológico de China, lo que pone en riesgo el liderazgo tecnológico de la región.